Día 18
Creado para Ayunar
Dios nos diseñó para ayunar. Esto era parte de Su plan cuando nos formó en el vientre de nuestras madres. El ayuno fue idea de Dios. Dios creó al hombre como espíritu y como carne, luego lo puso en el jardín. Y en medio del jardín estaba el árbol de la vida y el árbol del conocimiento del bien y del mal.
Génesis 2:16 dice que Dios le dijo a Adán y Eva “Pero no debes comer…” o en otras palabras: “tienes que ayunar”. Los puso en el jardín pero les dijo que negaran específicamente su deseo de comer del árbol del conocimiento del bien y del mal... Los creó para NEGAR y retener.
Los creó RÁPIDAMENTE. Él nos creó para negar nuestra carne. El ayuno no te hace inmune a los ataques, te hace susceptible a ellos. La serpiente vino cuando vio morir la carne. Si Adán hubiera negado su carne cuando vino el tentador, Adán habría permanecido en la presencia de Dios. Si no aprendes a negar tu carne, te encontrarás lejos de la presencia de Dios. Pero Su MISERICORDIA te trae de REGRESO a Su presencia.
Su sangre nos trae de regreso a Su presencia. Dios extrañó que Su pueblo estuviera en Su presencia, así que envió a Su hijo, Jesús, como sacrificio para que pudiéramos regresar a Su presencia. Estaba en el diseño original de Dios que ayunáramos; es por eso que espiritualmente fruncimos tanto el ceño cuando ayunamos. Cumplimos parte de Su diseño para nuestras vidas.
Oración:
Jesús, gracias por lo que hiciste para que pueda encontrarme contigo a diario. Gracias por tu misericordia que me permite conocerte y encontrarte sin restricciones.
Enséñame a negar mi carne para poder estar cerca de tu presencia. Aumenta mi temor del Señor. Me arrepiento por desear algo más que desearte a Ti. Eres el único al que temo y eres el único digno de mi vida.
Gracias por hacer que el ayuno sea parte de mi diseño, que me diste el ayuno como una forma de conectarme contigo y ser como tú. Gracias por este poderoso regalo que nos has dado que mata cada parte de mí que no te agrada. Hiciste lo difícil en la cruz para que encontrarte a Ti a través del ayuno fuera fácil. Quiero todo lo que tienes para mí en este ayuno.
Sagradas Escrituras:
Gálatas 2:20 NVI
He sido crucificado con Cristo. Ya no soy yo quien vive, sino Cristo quien vive en mí. Y la vida que ahora vivo en la carne, la vivo en la fe del Hijo de Dios, que me amó y se entregó a sí mismo por mí.
Génesis 2:9 (NVI)
Jehová Dios hizo brotar de la tierra todo árbol agradable a la vista y bueno para comer. Y en medio del jardín estaban el árbol de la vida y el árbol del conocimiento del bien y del mal.
Génesis 2:16-17 (NVI)
16 Y el SEÑOR Dios le ordenó: “Puedes comer libremente de todo árbol del jardín, 17 pero no debes comer [ayuno] del árbol del conocimiento del bien y del mal; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás.
Génesis 1:27
Dios creó al hombre a su imagen...
Génesis 2:7 NVI
entonces Jehová Dios formó al hombre del polvo de la tierra y sopló en su nariz aliento de vida, y el hombre se convirtió en un ser viviente.
Jeremías 1:5 NVI
“Antes de formarte en el vientre te conocí, y antes de que nacieras te consagré; Te nombré profeta a las naciones”.